UNA PRIMAVERA IMPRESIONISTA...
Hay algo en el impresionismo que atrae.
Ejerce una fuerza magnética sobre el espectador. Atrapa. Seduce. Invita a “meterse” en cada uno de estos cuadros amables que forman parte de tantos pasillos, de tantos consultorios, donde se requiere la paz de un estanque, la calma de una pradera.
Del arte individual al trabajo en equipo.
De lo objetivo a la mirada subjetiva.
De la academia al aire libre.
¿Estamos listos para entender que, a pesar de su arte mercantil, el impresionismo fue la puerta necesaria para la aparición de las Vanguardias artísticas?.
Resistido por la mayoría de la sociedad, se propone cuestionar lo que se ve y reflejarlo desde otro lugar.
El impresionismo da lugar a la mirada subjetiva de lo que se ve, del instante, de la propia percepción y de la concepción de mundo.
Por todos esos motivos, atender a este movimiento y garantizar su abordaje dentro de la trayectoria de nuestras infancias es respetar una vez más su derecho de acceso a la cultura que les pertenece.
Tenemos una propuesta para que este movimiento gane protagonismo en el mes de la primavera. Porque siempre hay una excusa para culturalizar...
Comparar con otros movimientos.
Crear al aire libre
Conocer sus máximos referentes
Explorar nuevos materiales, técnicas y acercamientos a la producción.
Disfrurar con creaciones individuales y grupales.
Una vez más será necesario nutrirnos de lo lúdico y lo artístico.
Lo merecemos y lo merecen.
Las espero siempre!
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