CINCO AÑOS NO ES NADA... Y ES TODO!

Hace cinco años empecé a soñar con un espacio donde tejer colectivamente redes de encuentro. Mi fuerte siempre ha sido el trabajo en equipo y era momento de extender los brazos y crecer.

Comencé tímidamente, como la semilla que apenas empieza a estirarse en búsqueda del sol.

Compartir ideas y reflexiones, objetivos que estaban bien claros delante del camino.

El arte, siempre presente, con la premisa irrenunciable de que Respirar el Arte era un derecho y un deber para todo docente inquieto que pretende interpelar su práctica permanentemente.

El camino no fue fácil, no todas fueron flores y cosas bonitas para recordar.

Pero siempre me defino como una especialista en insistir.

Y así, insistiendo sin pausa y sin prisa, con muchas horas de trabajo, papeles de ideas por todos lados y momentos de inspiración y otros de bloqueo, así fue como llegamos a estos cinco años.

Pandemia de por medio, y un año entre paréntesis, y a pesar del distanciamiento me sentí cada vez más cerca de ustedes.

Muchos compartían horas de la tarde con seminarios como único plan. Disertamos, soñábamos con el momento de volver a las salas, de abrazar a los chicos y chicas y concretar esos Proyectos que tanto habíamos maquinado.

Escribir, una de mis pasiones sin duda, me llevó a ver muchas de mis palabras compartidas en muros, con emoción, con la apuesta absoluta en el efecto multiplicador y en esta bendita ansiedad del ser de trascender hacia otros, hacia otras realidades y, un poco más ambicioso, hacia otros tiempos.

Hoy, cinco años después, reconozco que he crecido de la mano de cada uno de ustedes, cuando se sumaron a los debates, acordaron o no con las publicaciones, hicieron propias las propuestas con la obligación moral de reinventarlas cada vez.

Este espacio sin recetas, repleto de ebooks, recurseros, cajitas y seminarios, se convierte en nada sin ustedes.

No puedo sino dejar de pensar en aquel pensamiento que reza...

«Si un árbol cae en un bosque y nadie está cerca para oírlo, ¿hace algún sonido?»

El Mundo Inicial no es nada sin el otro. Ustedes son el otro, necesitamos de la cercanía, el cariño, el afecto, la lectura y la apropiación y reformulación de cada uno de nuestras propuestas para que esto pase.

Gracias por ser El Mundo Inicial. Festejen conmigo estos cinco años y permítanme ser parte de otros más.